Los anuncios luminosos por lo general están expuestos a diferentes daños por el medio ambiente. Cuando están en exteriores, su degradación puede verse acelerada por la lluvia, el sol, el aire, y las diferentes temperaturas a las que están expuestas. Si bien, rara vez las empresas y locales comerciales dedican un tiempo para darles mantenimiento a sus anuncios luminosos, lo recomendable es limpiarlos al menos una vez cada dos semanas, para evitar la acumulación de polvo, sarro, óxido, etc.

Por lo general, lo primero que se degrada en los anuncios luminosos en exteriores, son los colores, debido a que pierden su brillo que los hace llamativos. Cuando sea necesario limpiarlos, es necesario recordar que lo primero que se debe hacer es desconectarlos de la corriente eléctrica. Existen en el mercado diferentes productos para limpiar láminas y material de acrílico. Si bien, el agua y jabón neutro son fundamentales para la limpieza de los anuncios luminosos, si se agrega un poco de vinagre o limón al agua, las superficies quedarán más brillosas. También, se recomienda emplear un cepillo de cerdas suaves para acceder a los rincones más ocultos. Para terminar, se puede usar un trapo de algodón y amoniaco, para eliminar la suciedad pegada.